El biogás se obtiene a partir de la fermentación o digestión de los desechos orgánicos que se producen en industrias como la alimentaria, la agrícola o la ganadera; así como en el tratamiento de las aguas residuales urbanas que se lleva a cabo en las Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales (EDARs), entre otras.
Este biogás obtenido de los digestores se utiliza, principalmente, en calefacción o generación de electricidad, y el excedente de producción se quema de forma segura y controlada para evitar situaciones de emergencia. Como uno de los componentes mayoritarios del biogás es el sulfuro de hidrógeno, cuando éste se oxida en la combustión se generan óxidos de azufre que con la humedad del aire (vapor de agua) generan lluvia ácida, causando un daño medioambiental y a la salud humana, así como la corrosión metálica de las propias instalaciones.
Para la eliminación de este componente azufrado que causa tantos problemas en la combustión del biogás habitualmente se aplica filtración mediante carbón activo, lo cual tiene el inconveniente de que precisa de posterior tratamiento, al transformarse el carbón saturado de sulfhídrico en un residuo peligroso, lo cual presenta problemas medioambientales y económicos por el mismo coste de adquisición del carbón activado y de los gastos asociados a su eliminación en empresas de gestión de residuos. Por ello, surge la necesidad de buscar otras alternativas.
El Grupo Operativo S-Valor, formado por la ingeniería INERCO Biogás, el Centro Tecnológico Tecnova, la empresa de insumos y ensayos Viagro, la federación de Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía y el Grupo de Desarrollo Rural (GDR) Gran Vega, ha dado respuesta a esta necesidad, y ha desarrollado un novedoso sistema de desulfuración del biogás mediante adsorción usando un sistema de filtración mediante lechos de óxidos e hidróxidos de hierro, que se va a poner a prueba en una EDAR urbana ubicada en Andalucía.
La característica principal de estos materiales adsorbentes, más económicos que el tradicional carbón activo, es que permite retirar el ácido sulfhídrico, y con ello el azufre, de la corriente gaseosa procesada, integrándolo en la composición del lecho de filtración, el cual una vez sustituido tras su saturación, presenta cualidades atractivas para su uso en la agricultura, con lo que en vez de resultar costoso su posterior tratamiento es incluso valorizable.
Entre las posibles aplicaciones de revalorización se encuentran su uso, en formato pellet, como sustrato de cultivo o como enmienda física de suelos, el aporte de azufre como uno de los macronutrientes secundarios de las plantas, la desodificación de los suelos y la reducción del pH del suelo.
Estos pellets se van a utilizar como sustrato en un ensayo de campo en hortícolas, en concreto, en pepino, donde se va a evaluar, entre otros parámetros, rendimiento de cultivo en comparación con otro sustrato de referencia y ampliamente utilizado en el campo como es la fibra de coco.
El prototipo
Este prototipo de desulfuración mediante absorción aterrizará en una EDAR de Andalucía, donde tendrán lugar las pruebas de validación de la tecnología para obtener el lecho de filtración agotado y ya enriquecido en azufre.
Además, para dar a conocer las posibilidades de este sistema, el grupo Operativo ha celebrado una jornada virtual tipo “webinar” bajo el título: ‘Nuevas tecnologías para la valorización del biogás generado en las EDARs’, que ha sido seguida por un centenar de personas.
En la misma se ha presentado el Grupo Operativo S-Valor y se han explicado los principales objetivos del proyecto. La encargada de dicha tarea fue María José Gonzalez, técnica del departamento de Biotecnología y Bioprocesos en la fundación Tecnova.
A continuación, el director gerente de Inerco Biogás S.L, Jesús Manuel Tagua, desarrolló los aspectos puramente técnicos del prototipo desarrollado para la desulfuración del biogás y su comparativo con los métodos tradicionales de filtración. Así, ha centrado su intervención en los filtros más usados en las EDARs, como son: el carbón activado, las sales férricas, la desulfuración biológica y el lavado químico.
La perspectiva en materia química la ha aportado Agustín Beledo, de la empresa Viagro, quien ha puesto el foco en lo que le sucede al lecho de pellets que conforman el filtro del prototipo S-Valor, y cuáles pueden ser sus posibles aplicaciones.
El punto y final a la jornada lo han puesto María Teresa Blanco y Joaquín Caballero, de la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural; y de la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul, respectivamente, quienes han abordado la normativa de cumplimiento sobre depuración y residuos en las EDARs.
Esta jornada está disponible y se puede consultar en la página web del proyecto: https://svalor.grupooperativo.es/
El proyecto S-Valor se enmarca en la convocatoria 2020 de ayudas para el Funcionamiento de Grupos Operativos regionales de la Asociación Europea de Innovación (AEI) en materia de productividad y sostenibilidad agrícola. Está financiado por el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (FEADER) y está cofinanciado por la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía.